Carta para mi yo futura Historiadora del Arte.

Querida yo del futuro, no se los años que habrán pasado, si muchos o quizá me leas al día siguiente de escribir esto, si han pasado cinco años espero que lo haya conseguido, que tenga la carrera y que no haya parado, que me este especializando, haciendome profesional y llegar hasta la cima y con toda la suerte del mundo dedicarme a lo que estudio, a lo que me habré dedicado tanto durante tantos años y con toda la suerte del universo en mi propia ciudad, mi ciudad llamada historia.

Ser sabia, poder hablar sabiendo, nunca me ha gustado hablar sin saber, es de ignorantes, prefiero callar y quedar como que no lo se a hablar y quedar como una inculta, y después si me interesa informarme para, la próxima vez, hablar sabiendo.

Creo que es mi frase maestra y la utilizaré cada vez que me calle por que no lo sé o cada vez que escuche a alguien que habla sin saber. Como decía mi bisabuela ,a quien siempre recordaré y quien se que esta orgullosa de mi, quien ojalá hubiera visto hasta donde he llegado, el saber no ocupa lugar.

Por eso le hablo a mi yo del futuro, quien será historiadora del arte, cuando me leas sonríe, porque te habrás hinchado a estudiar, a leer, a mirar imágenes  y espero a trabajar con materiales auténticos de la antigüedad, en lugares antiguos y aprendiendo cada día más pero serás quien eres gracias a ello, tu te lo ganaste, no te rindas en el camino, largo pero victorioso. LLegarás muy lejos y cuando veas a esa profesora del colegio que decía que no serías nada con esas notas y te pregunte que tal te va podrás irte sonriendo, así la próxima vez no hablará sin saber.

Querida yo del futuro, es una experiencia maravillosa dedicarse a esto, continúa.